Formación y empleo en la transición energética: ¿una oportunidad para las mujeres?
Tanto desde la academia como desde la sociedad son múltiples las voces que claman por una participación más igualitaria entre mujeres y hombres, especialmente en los ámbitos científicos, en los que las mujeres están infrarrepresentadas. El 11 de febrero, declarado por la Organización de Naciones Unidas el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, trata de visibilizar y reconocer el trabajo de las mujeres en los ámbitos STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés) e incentivar una participación efectiva y equitativa en las trayectorias educativas y sus posteriores trayectorias laborales.
El problema del cambio climático
La llamada transición enérgetica de muchos países está actualmente en el punto de mira. Uno de los principales problemas sociales de la actualidad es el cambio climático y el medio ambiente (entre los 10 primeros según encuesta del CIS de enero 2024 y según el Eurobarómetro de diciembre de 2023). Las distintas cumbres del clima (COP28, la última en celebrarse, en 2023) unen a los países en la adquisición de compromisos, que impulsen la descarbonización y avancen en energías verdes. Estas políticas, focalizadas en la transición energética, se consideran un factor transformador del escenario económico para las próximas décadas y abren oportunidades sin precedentes para un crecimiento económico sostenible e inclusivo.
La transición energética es un proceso de enorme envergadura, que afecta a diferentes agentes (empresas, hogares, inversores, instituciones) y en varios ámbitos (economía, política, educación, etc.).
La transición energética en España y la participación de las mujeres
En España, atendiendo al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030 (PNIEC), se prevé la creación de entre 250.000 y 350.000 nuevos empleos anuales durante este período, la mayoría de alta y media cualificación. Por tanto, se espera que los sectores centrales en la transición energética ofrezcan importantes oportunidades en términos de empleo.
Sin embargo, ¿podemos asegurar que hombres y mujeres tendrán las mismas oportunidades de acceso a estos empleos? ¿la transición energética se va a desarrollar de una manera “justa” desde la perspectiva de género?
Estrategia de Transición Justa
El Instituto de Transición Justa (ITJ), organismo autónomo adscrito al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, desarrolló una Estrategia de Transición Justa, dentro del Marco Estratégico de Economía y Clima, aprobada por el gobierno en febrero de 2019. Esta Estrategia, entre otros objetivos, pretende garantizar un aprovechamiento igualitario de las oportunidades, para reducir las desigualdades laborales de las mujeres en los sectores de la transición ecológica.
Para alcanzar ese objetivo es necesario, en primer lugar, tener un diagnóstico de situación, identificar las brechas de género de partida y tratar de aproximarnos a sus causas, para así poder planificar acciones efectivas que reduzcan las desigualdades. El estudio “El empleo de las mujeres en la transición energética justa en España. Análisis cuantitativo y cualitativo”, publicado en 2023 por la Fundación Naturgy y promovido por el ITJ, tiene como principal objetivo conocer la posición y situación de las mujeres en las actividades relacionadas con la transición energética e identificar actuaciones que promuevan su incorporación al empleo de la misma.
Este informe evidencia la existencia de múltiples brechas de género en estas actividades, tanto en España como en Europa, la principal en cuanto a su participación, donde las mujeres representan el 16,5% en el sector de la transición, cuando en el global de la economía suponen el 46,1% (19,7% en la UE-27). Una de las causas de esta baja representación femenina en el sector se explica por la existencia de una brecha previa en el acceso de mujeres a las titulaciones técnicas (tanto las titulaciones universitarias STEM como las de Formación Profesional), que son necesarias para cubrir los puestos laborales en las actividades de la transición.
Menor participación de las mujeres en iniciativas de transición energética
La menor participación de mujeres en estos estudios viene influida, entre otras causas, por los estereotipos de género, que determinan las preferencias y expectativas formativas y profesionales desde las etapas más tempranas, que se prolongan en la adolescencia y juventud y dificultan, en última instancia, la plena inclusión profesional de muchas mujeres (CES, 2022).
Las competencias matemáticas y científicas que se desarrollan en las etapas educativas más tempranas muestran algunas diferencias entre hombres y mujeres (Castro y Santero, 2023).
Cuando se progresa en la etapa educativa, y se alcanza la educación superior, la brecha de género en las graduaciones en programas STEM es muy alta y persistente en el tiempo.
En España, el 36% de los varones obtiene una titulación STEM frente a sólo el 11% de las graduadas; y es mayor en los grados superiores de formación profesional (FP) relacionados con la transición energética, donde sólo el 7,9% son mujeres. El Gráfico 1 muestra el grado de feminización en las titulaciones universitarias relacionadas con el empleo de la transición energética, y su evolución en el último lustro.
Gráfico 1. Matriculaciones de mujeres en titulaciones universitarias relacionadas con el empleo de la transición energética. Periodo 2015-2021. Porcentaje de mujeres sobre el total.
Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Ministerio de Universidades
La titulación de ingeniería medioambiental tiene una participación equilibrada en las titulaciones, aspecto que coincide con la literatura, que indica que las mujeres tienen una sensibilidad mayor hacia los temas medioambientales que los hombres (Dzialo, 2017). Sin embargo, en las titulaciones universitarias de ingeniería de la energía, de minas y energía, o del automóvil, están infrarrepresentadas, sin alcanzar el nivel de masa crítica del 30% considerado en los estudios sociológicos, y, además, con una evolución temporal negativa.
Obstáculos para elegir carreras STEM
El estudio también aborda, desde una investigación cualitativa, los obstáculos que se encuentran las mujeres que ya ocupan distintas posiciones laborales en el sector. Según el análisis de contenido de varios grupos de discusión y entrevistas, los principales obstáculos se sitúan en la falta de referentes y a los estereotipos de género presentes en la sociedad, que afectan a las decisiones de niñas y mujeres, tanto en sus vocaciones como en sus itinerarios académicos y laborales. Es por ello que una de las líneas de acción propuesta es la visibilidad y el debate público, que busca combatir esos estereotipos de género, dando a conocer diferentes perfiles de mujeres que participan en el sector, y que tradicionalmente se han podido considerar “masculinos”.
Esta visibilización está en línea con el objetivo de la Asamblea de Naciones Unidas en 2015 para declarar el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia.
¿Qué puede hacer la Universidad para propiciar la presencia de la mujer en la transición energética?
La Universidad es un actor clave para el avance de la igualdad en la ciencia, y sus actuaciones deben traspasar sus fronteras hacia otros entornos educativos. Esta labor se desarrolla celebrando múltiples actividades para conmemorar ese día (en algunas, incluso semana), dentro y fuera de la universidad, en colegios de primaria, en institutos de secundaria y formación profesional. Sin embargo, no se debe perder de vista que los ámbitos científicos universitarios, en general, están reduciendo las matriculaciones, y que las previsiones de crecimiento del empleo en sectores emergentes, como la transición energética o la digitalización, requieren de personal cualificado, que va a necesitar de todo el potencial, de hombres y mujeres. Quizás también sea necesario una reflexión conjunta por parte de las universidades y los sectores de actividad para abordar este futuro con mayor responsabilidad, seguridad y justicia.
Una reflexión muy necesaria y oportuna. Enhorabuena, profesora Santero por tu nueva entrada en el blog desde 2018.